El Servicio Electoral (Servel) solicitó al Gobierno la posibilidad de otorgar un bono extraordinario de 1 Unidad de Fomento (cerca de $38.000) para los vocales de mesa, delegados de las juntas electorales y asistentes que participaron el 26 y 27 de octubre y que cumplan funciones en la segunda votación de Gobernadores Regionales, el 24 de noviembre, en las regiones donde corresponda. Actualmente, los vocales de mesa reciben 2/3 de UF por día trabajado, lo que equivale a un total de $50.000 por ambas jornadas de octubre, más otros $25.290 por su labor en la segunda vuelta. La petición de Servel, enviada a los ministros de Hacienda, Mario Marcel, y de la Secretaría General de la Presidencia, Álvaro Elizalde, busca reconocer el esfuerzo adicional de quienes apoyen en ambas instancias.
Luego de una maratónica jornada de elecciones municipales y regionales, las quejas de vocales de mesa se tomaron las redes sociales. Los encargados de contar los votos relataron una experiencia agotadora, marcada por horas interminables de trabajo que, en algunos casos, se extendieron hasta las 2 o 3 de la madrugada. Mientras los resultados de alcaldes y gobernadores se dieron a conocer con relativa rapidez, el conteo de concejales y consejeros regionales sufrió importantes retrasos debido a la gran cantidad de candidatos y el voto obligatorio, lo que complicó la labor de los vocales. Entre las voces de protesta se alzaron figuras públicas como Carla Jara, quien, a través de su cuenta de Instagram, denunció el desmedido trabajo: “Esto no puede ser. La gente se levanta mañana temprano igual, lo encuentro terrible. Estoy muy enojada”, expresó la actriz, quien terminó su labor alrededor de las 2 de la madrugada. Asimismo, la comediante Pamela Leiva también utilizó sus redes para manifestar su indignación, describiendo la situación comoinhumana tras más de ocho horas de conteo de votos. “No puede ser que se puedan presentar tantos candidatos y que no haya un sistema más expedito para contar los votos”, criticó Leiva, quien finalmente concluyó su labor pasadas la 1:30 de la mañana. Finalmente, las críticas no se limitaron a las figuras públicas. Usuarios anónimos en redes sociales también apuntaron contra el Servicio Electoral (Servel), reclamando que el trabajo de los vocales de mesa carece de un pago adecuado, condiciones mínimas de colación y descanso, y horarios razonables. Los vocales piden mejoras urgentes, entre las que destacan una reestructuración de los tiempos de trabajo y un reconocimiento justo por sus horas invertidas en el proceso democrático del país.
El Servicio Electoral (Servel) solicitó al Gobierno la posibilidad de otorgar un bono extraordinario de 1 Unidad de Fomento (cerca de $38.000) para los vocales de mesa, delegados de las juntas electorales y asistentes que participaron el 26 y 27 de octubre y que cumplan funciones en la segunda votación de Gobernadores Regionales, el 24 de noviembre, en las regiones donde corresponda. Actualmente, los vocales de mesa reciben 2/3 de UF por día trabajado, lo que equivale a un total de $50.000 por ambas jornadas de octubre, más otros $25.290 por su labor en la segunda vuelta. La petición de Servel, enviada a los ministros de Hacienda, Mario Marcel, y de la Secretaría General de la Presidencia, Álvaro Elizalde, busca reconocer el esfuerzo adicional de quienes apoyen en ambas instancias.
Luego de una maratónica jornada de elecciones municipales y regionales, las quejas de vocales de mesa se tomaron las redes sociales. Los encargados de contar los votos relataron una experiencia agotadora, marcada por horas interminables de trabajo que, en algunos casos, se extendieron hasta las 2 o 3 de la madrugada. Mientras los resultados de alcaldes y gobernadores se dieron a conocer con relativa rapidez, el conteo de concejales y consejeros regionales sufrió importantes retrasos debido a la gran cantidad de candidatos y el voto obligatorio, lo que complicó la labor de los vocales. Entre las voces de protesta se alzaron figuras públicas como Carla Jara, quien, a través de su cuenta de Instagram, denunció el desmedido trabajo: “Esto no puede ser. La gente se levanta mañana temprano igual, lo encuentro terrible. Estoy muy enojada”, expresó la actriz, quien terminó su labor alrededor de las 2 de la madrugada. Asimismo, la comediante Pamela Leiva también utilizó sus redes para manifestar su indignación, describiendo la situación comoinhumana tras más de ocho horas de conteo de votos. “No puede ser que se puedan presentar tantos candidatos y que no haya un sistema más expedito para contar los votos”, criticó Leiva, quien finalmente concluyó su labor pasadas la 1:30 de la mañana. Finalmente, las críticas no se limitaron a las figuras públicas. Usuarios anónimos en redes sociales también apuntaron contra el Servicio Electoral (Servel), reclamando que el trabajo de los vocales de mesa carece de un pago adecuado, condiciones mínimas de colación y descanso, y horarios razonables. Los vocales piden mejoras urgentes, entre las que destacan una reestructuración de los tiempos de trabajo y un reconocimiento justo por sus horas invertidas en el proceso democrático del país.