En la comuna de Llay Llay se firmó un acuerdo de colaboración entre el Gobierno Regional y el Seremi de Transportes, que buscará mejorar el transporte rural de Valparaíso, a través de una inversión de $2.100 millones de pesos anuales, que estarán disponibles a partir de 2025. Con esto, se busca materializar 28 nuevos recorridos rurales de transporte público que beneficiarán directamente a 23.014 personas de 16 comunas de la región, siendo un esfuerzo fundamental para garantizar que todos los habitantes de la región, indistintamente del lugar que habiten, puedan acceder a servicios de transporte público de calidad, seguro y a un precio justo. Junto con destacar el carácter descentralizador del hito y el liderazgo del Gobierno Regional para concretarlo, el Seremi de Transportes Edgardo Piqué destacó que “esta colaboración beneficia a comunidades que hoy día no cuentan con un servicio de transporte rural o transporte público, además para las personas mayores va a ser de gratuidad total y va a permitir también que esas personas puedan acceder a los centros urbanos con mayor frecuencia con mayor regularidad y con mayor seguridad. Por lo tanto, estamos muy contentos y hemos contado con la presencia de la diputada Carolina Marzán, porque este trabajo ha sido fruto también su esfuerzo, ya que ha impulsado estos proyectos, que técnicamente hemos elaborado desde el Ministerio de Transportes y que esperamos que prontamente se sometan a consideración del consejo regional para su aprobación. Además, agregó que “Esta es una inyección de recursos que va a poder ser factible a propósito de la nueva Ley de subsidios que permite que los gobiernos regionales puedan hacer inversión directa en operación de transporte público y en consecuencia va a permitir dar garantía de continuidad a estos servicios durante todo el año calendario. Estamos cumpliendo con el objetivo del gobierno del Presidente Gabriel Boric de dotar a la ciudadanía de transporte público y disminuir las brechas de conectividad”. Por su parte, la diputada Carolina Marzán, impulsora de la iniciativa, destacó la democratización de la inversión en transporte público de la región, afirmando que “esto es un beneficio integral para la comunidad, para quienes viven en zonas alejadas y que el transporte no sea un impedimento para seguir habitando sus comunas. Viene a democratizar y a hacer más equitativo el medio de transporte de las personas, porque todo lo que llega desde el gobierno central siempre está pensado en el espacio metropolitano de la Región de Valparaíso y hay que entender que la ruralidad es parte de nuestra geografía, que hay familias que habitan estos sectores, donde también hay gran producción económica. Esto viene a hacer justicia a una demanda que hace muchos años se está levantando”. Este convenio de impacto social y económico estima obtener los recursos aprobados el primer trimestre de 2025, para iniciar la operación de los recorridos el primer semestre de 2025.
Como un antes y un después fue catalogado el impacto que tendrá la aprobación de la ley de transporte público. Es que con ella se busca empareja la cancha entre Santiago y las regiones. A partir de hoy, reducir esa brecha de manera más rápida será posible, ya que se crea un nuevo marco de financiamiento del transporte público, el que actualiza modelo vigente de distribución de subsidios, tanto para el sistema de transporte metropolitano (RED) como para aquellos servicios de movilidad en regiones. Entre las novedades que establece la nueva normativa destaca la entrega de mayores recursos al Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) para crear proyectos de transporte en zonas aisladas, principalmente en lugares donde no existen servicios subsidiados, pero también en aquellas localidades donde se necesita reforzar la conectividad. A su vez, la nueva ley redefine el marco mínimo de inversión vinculado al Fondo de Apoyo Regional (FAR) -también conocidos como “fondos espejo”- que es administrado por los gobiernos regionales. En concreto, se establece que el 50% de los recursos deberá destinarse únicamente a la infraestructura de transporte, a la renovación de flota o a subsidios de operación; mientras que el otro 50% de financiamiento será para invertir en infraestructura para mejorar e implementar los servicios de transporte o conectividad en zonas aisladas, por ejemplo: mejoramiento de paraderos. En la actualidad, solo alrededor de un 18% de estos fondos se ejecutan en proyectos asociados al transporte. Por otro lado, y con el fin de fortalecer un sello local en la inversión dedicada al transporte o nuevos servicios, el nuevo marco también incorpora la conformación de comités de transporte regional, los que estarán vinculados directamente a dichos gobiernos determinar proyectos, acordes a sus necesidades territoriales y con una perspectiva integral de ciudad. La nueva ley también facilitará el financiamiento de buses cero emisiones en todas las regiones del país, con principal énfasis en la electromovilidad. Además, favorecerá la construcción de infraestructura asociada a este tipo de proyectos, por ejemplo, los terminales o centros de carga necesarios para el abastecimiento de estos vehículos.
En la comuna de Llay Llay se firmó un acuerdo de colaboración entre el Gobierno Regional y el Seremi de Transportes, que buscará mejorar el transporte rural de Valparaíso, a través de una inversión de $2.100 millones de pesos anuales, que estarán disponibles a partir de 2025. Con esto, se busca materializar 28 nuevos recorridos rurales de transporte público que beneficiarán directamente a 23.014 personas de 16 comunas de la región, siendo un esfuerzo fundamental para garantizar que todos los habitantes de la región, indistintamente del lugar que habiten, puedan acceder a servicios de transporte público de calidad, seguro y a un precio justo. Junto con destacar el carácter descentralizador del hito y el liderazgo del Gobierno Regional para concretarlo, el Seremi de Transportes Edgardo Piqué destacó que “esta colaboración beneficia a comunidades que hoy día no cuentan con un servicio de transporte rural o transporte público, además para las personas mayores va a ser de gratuidad total y va a permitir también que esas personas puedan acceder a los centros urbanos con mayor frecuencia con mayor regularidad y con mayor seguridad. Por lo tanto, estamos muy contentos y hemos contado con la presencia de la diputada Carolina Marzán, porque este trabajo ha sido fruto también su esfuerzo, ya que ha impulsado estos proyectos, que técnicamente hemos elaborado desde el Ministerio de Transportes y que esperamos que prontamente se sometan a consideración del consejo regional para su aprobación. Además, agregó que “Esta es una inyección de recursos que va a poder ser factible a propósito de la nueva Ley de subsidios que permite que los gobiernos regionales puedan hacer inversión directa en operación de transporte público y en consecuencia va a permitir dar garantía de continuidad a estos servicios durante todo el año calendario. Estamos cumpliendo con el objetivo del gobierno del Presidente Gabriel Boric de dotar a la ciudadanía de transporte público y disminuir las brechas de conectividad”. Por su parte, la diputada Carolina Marzán, impulsora de la iniciativa, destacó la democratización de la inversión en transporte público de la región, afirmando que “esto es un beneficio integral para la comunidad, para quienes viven en zonas alejadas y que el transporte no sea un impedimento para seguir habitando sus comunas. Viene a democratizar y a hacer más equitativo el medio de transporte de las personas, porque todo lo que llega desde el gobierno central siempre está pensado en el espacio metropolitano de la Región de Valparaíso y hay que entender que la ruralidad es parte de nuestra geografía, que hay familias que habitan estos sectores, donde también hay gran producción económica. Esto viene a hacer justicia a una demanda que hace muchos años se está levantando”. Este convenio de impacto social y económico estima obtener los recursos aprobados el primer trimestre de 2025, para iniciar la operación de los recorridos el primer semestre de 2025.
Como un antes y un después fue catalogado el impacto que tendrá la aprobación de la ley de transporte público. Es que con ella se busca empareja la cancha entre Santiago y las regiones. A partir de hoy, reducir esa brecha de manera más rápida será posible, ya que se crea un nuevo marco de financiamiento del transporte público, el que actualiza modelo vigente de distribución de subsidios, tanto para el sistema de transporte metropolitano (RED) como para aquellos servicios de movilidad en regiones. Entre las novedades que establece la nueva normativa destaca la entrega de mayores recursos al Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) para crear proyectos de transporte en zonas aisladas, principalmente en lugares donde no existen servicios subsidiados, pero también en aquellas localidades donde se necesita reforzar la conectividad. A su vez, la nueva ley redefine el marco mínimo de inversión vinculado al Fondo de Apoyo Regional (FAR) -también conocidos como “fondos espejo”- que es administrado por los gobiernos regionales. En concreto, se establece que el 50% de los recursos deberá destinarse únicamente a la infraestructura de transporte, a la renovación de flota o a subsidios de operación; mientras que el otro 50% de financiamiento será para invertir en infraestructura para mejorar e implementar los servicios de transporte o conectividad en zonas aisladas, por ejemplo: mejoramiento de paraderos. En la actualidad, solo alrededor de un 18% de estos fondos se ejecutan en proyectos asociados al transporte. Por otro lado, y con el fin de fortalecer un sello local en la inversión dedicada al transporte o nuevos servicios, el nuevo marco también incorpora la conformación de comités de transporte regional, los que estarán vinculados directamente a dichos gobiernos determinar proyectos, acordes a sus necesidades territoriales y con una perspectiva integral de ciudad. La nueva ley también facilitará el financiamiento de buses cero emisiones en todas las regiones del país, con principal énfasis en la electromovilidad. Además, favorecerá la construcción de infraestructura asociada a este tipo de proyectos, por ejemplo, los terminales o centros de carga necesarios para el abastecimiento de estos vehículos.