Durante el extenso feriado de Fiestas Patrias, el valle de Aconcagua se consolidó como uno de los destinos más concurridos de la región, logrando posicionarse entre los tres primeros lugares con mayor ocupación hotelera y afluencia de visitantes. La zona, conocida por sus paisajes montañosos, viñedos y tradiciones rurales, atrajo tanto a turistas nacionales como extranjeros, quienes disfrutaron de diversas actividades culturales y gastronómicas. Lo que sin duda se vio potenciado por las actividades tradicionales como la Fiesta del Guatón Loyola en Los Andes y la Vendimia en San Esteban. Desde Sernatur destacaron las cifras de este feriado, señalando que la ocupación hotelera superó las expectativas iniciales, lo que refleja el interés por el valle como destino turístico de preferencia. La amplia oferta de servicios turísticos y la variedad de eventos organizados en torno a las celebraciones patrias fueron factores clave en la alta demanda registrada. Con este impulso, el Valle de Aconcagua no solo reafirma su potencial como un polo turístico de relevancia a nivel nacional, sino que también se proyecta como un lugar clave para el desarrollo de la industria turística en la región. Las autoridades locales ya evalúan nuevas estrategias para continuar fortaleciendo el turismo y mantener este nivel de ocupación en el futuro
Durante el extenso feriado de Fiestas Patrias, el valle de Aconcagua se consolidó como uno de los destinos más concurridos de la región, logrando posicionarse entre los tres primeros lugares con mayor ocupación hotelera y afluencia de visitantes. La zona, conocida por sus paisajes montañosos, viñedos y tradiciones rurales, atrajo tanto a turistas nacionales como extranjeros, quienes disfrutaron de diversas actividades culturales y gastronómicas. Lo que sin duda se vio potenciado por las actividades tradicionales como la Fiesta del Guatón Loyola en Los Andes y la Vendimia en San Esteban. Desde Sernatur destacaron las cifras de este feriado, señalando que la ocupación hotelera superó las expectativas iniciales, lo que refleja el interés por el valle como destino turístico de preferencia. La amplia oferta de servicios turísticos y la variedad de eventos organizados en torno a las celebraciones patrias fueron factores clave en la alta demanda registrada. Con este impulso, el Valle de Aconcagua no solo reafirma su potencial como un polo turístico de relevancia a nivel nacional, sino que también se proyecta como un lugar clave para el desarrollo de la industria turística en la región. Las autoridades locales ya evalúan nuevas estrategias para continuar fortaleciendo el turismo y mantener este nivel de ocupación en el futuro