Un nuevo hecho delictual se registró durante este fin de semana en la ciudad de San Felipe. Esta vez, delincuentes ingresaron hasta una joyería ubicada en calle Salinas, pleno centro de la comuna, desde donde se llevaron especies que hasta el momento fueron avaluadas en más de 12 millones de pesos, monto que podría aumentar una vez que se realice el arqueo. Fue el propio dueño de la joyería, Luis Cárcamo quien se refirió a este hecho del cual se dieron cuenta a través de la inspección de cámaras de seguridad del recinto. “Mi hijo en la noche ve las cámaras y el sábado se le pasó la hora y las vio pasadas las 1 de la madrugada. En eso me dijo que se nos había quedado una puerta abierta pero cómo yo me aseguro que eso no ocurra, fuimos al local y estando ahí, nos encontramos con la sorpresa que se habían metido por atrás. Empezamos a revisar y claro, vaciaron las vitrinas, se llevaron todo lo de plata y oro. También el dinero de la caja y muchos relojes” dijo. La desesperación del locatario y su hijo, los hicieron salir rápidamente hacia la joyería y una vez que el hecho quedó al descubierto quisieron contactar a Carabineros, pero no habían llevado sus teléfonos celulares por lo que –dada la cercanía- tuvieron que ir hasta el municipio donde el guardia informó a la policía uniformada que en cosa de minutos llegó al lugar. Revisando las cámaras, se percataron que los delincuentes estuvieron desde las 10 de la noche hasta cerca de las 11 al interior de la joyería. “Estuvieron como 45 minutos adentro y ahí nos robaron unas hechuras de joyería, me robaron unas cosas que estaban separadas, que eran de los clientes que van abonando para diciembre y esos es una pérdida grande porque ahora también debo responderles a esos clientes”, explicó acongojado Luis Cárcamo. Los delincuentes ingresaron al recinto encapuchados y con guantes a fin de no dejar rastros, sin embargo, en las primeras diligencias realizadas por Carabineros en compañía con las víctimas, se encontró un par de guantes y el napoleón que presuntamente utilizaron para romper los candados, especies que fueron enviadas a peritaje en busca de huellas o antecedentes que permitan la individualización de los antisociales. También se están revisando cámaras del sector dado que existen sospechas que los antisociales para llegar a la parte posterior del local, pudieron haber ingresado desde un estacionamiento de calle Coimas, que colinda con la joyería. FOTOGRAFÍA REFERENCIAL
La tarde de este viernes, delincuentes armados y con sus rostros tapados, robaron en la tienda Entel en pleno centro de la ciudad. De acuerdo a las primeras informaciones, se trataría de cuatro sujetos, sumamente agresivos, que llegaron hasta la intersección de calles Prat con Portus, a bordo de dos vehículos. Tras amenazar a los trabajadores, habrían robado diversas especies, las que al momento no han sido cuantificadas. En su huida, los antisociales arrojaron “miguelitos” para evitar ser seguidos por la policía. Carabineros realiza intensas diligencias para dar con las identidades y paraderos de los –hasta ahora- desconocidos.
El general Max Jiménez, jefe de zona de la Región de O’Higgins, anunció la baja de cinco funcionarios de Carabineros implicados en el robo a la empresa de valores Brinks, ocurrido el 16 de agosto en Rancagua. En una conferencia de prensa conjunta con la Fiscalía, Jiménez calificó el incidente como de “extrema gravedad” y subrayó que Carabineros de Chile no tolerará comportamientos delictivos en sus filas. “Carabineros está comprometido con la seguridad de la comunidad y no aceptará personas que se alejen de su doctrina, menos aún delincuentes dentro de la institución”, afirmó. A pesar de la presión, Jiménez descartó renunciar a su cargo, defendiendo el trabajo realizado por las unidades de investigación del OS9 y del Departamento de Asuntos Internos (DAICAR). Finalmente, el general destacó la rapidez del operativo, que resultó en la detención de siete participantes en el robo, elevando a más de 20 los detenidos hasta la fecha. “Gracias a este despliegue operativo, hemos podido recopilar importantes antecedentes sobre la presunta participación de estos excarabineros”, aseguró Jiménez, reiterando su compromiso con la transparencia y la ética en la policía.
La Parroquia Nuestra Señora de La Asunción de Los Andes fue víctima de otro robo, pero esta vez afectando a uno de sus elementos más emblemáticos. Desde ambas campanas, ubicadas en el frontis del recinto, fueron sustraídos dos badajos de metal de aproximadamente 5 kilos cada uno, afectando completamente el funcionamiento de estas piezas, las que tienen un profundo valor histórico para la parroquia y la comunidad. Estas campanas, datan de mayo de 1896, representando un patrimonio significativo que ha sido parte importante de la vida religiosa de Los Andes por más de un siglo. Es así, como este incidente, se suma a una serie de robos que ha afectado a la parroquia en diversas ocasiones durante el trascurso del año, incluyendo hurtos en el comedor de la institución. La comunidad y trabajadores de la parroquia lamentan esta situación, puesto que solo se dedican a entregar ayuda a quienes más lo necesitan. Si bien, la parroquia cuenta con sistema de seguridad, señalan que este deberá ser complementado con cámaras prontamente, para así evitar este tipo de situaciones que finalmente podrían repercutir en el cierre definitivo del comedor solidario que allí se encuentra. Por su parte la iglesia espera que estos elementos puedan ser devueltos y hacen un llamado a la comunidad a estar atentos y reporten cualquier intento de comercialización de los badajos sustraídos.
La Parroquia Nuestra Señora de La Asunción de Los Andes enfrentó una lamentable situación tras el robo de la mercadería destinada a la entrega de almuerzos en su comedor San Alberto Hurtado, el cual beneficia a una gran cantidad de personas en situación de calle en la ciudad. Este incidente es el más reciente en una serie de robos que han afectado a la parroquia en otras ocasiones, tres durante las últimas semanas. Con esta última intrusión, ya son tres las veces que el comedor ha sido blanco de los delincuentes, impactando a cerca de 80 personas que dependen de este servicio para sus comidas diarias. Los involucrados pasaron el sistema de seguridad para ingresar y sustraer la mercadería, rompiendo el vidrio de una de las puertas para ingresar por la zona de la cocina y llevarse consigo diversos productos como carnes y verduras. Esta situación ha obligado a la parroquia a suspender temporalmente el servicio de almuerzos por 10 días, lo que ha generado descontento y preocupación entre la comunidad y los beneficiarios. La parroquia, que se ha esforzado por mantener este vital servicio comunitario a pesar de los reiterados robos, advirtió que futuros incidentes podrían llevarlos a reconsiderar la continuidad del comedor San Alberto Hurtado, lo que claramente afectaría al bienestar de las personas que dependen de este servicio esencial en la ciudad.
Un nuevo hecho delictual se registró durante este fin de semana en la ciudad de San Felipe. Esta vez, delincuentes ingresaron hasta una joyería ubicada en calle Salinas, pleno centro de la comuna, desde donde se llevaron especies que hasta el momento fueron avaluadas en más de 12 millones de pesos, monto que podría aumentar una vez que se realice el arqueo. Fue el propio dueño de la joyería, Luis Cárcamo quien se refirió a este hecho del cual se dieron cuenta a través de la inspección de cámaras de seguridad del recinto. “Mi hijo en la noche ve las cámaras y el sábado se le pasó la hora y las vio pasadas las 1 de la madrugada. En eso me dijo que se nos había quedado una puerta abierta pero cómo yo me aseguro que eso no ocurra, fuimos al local y estando ahí, nos encontramos con la sorpresa que se habían metido por atrás. Empezamos a revisar y claro, vaciaron las vitrinas, se llevaron todo lo de plata y oro. También el dinero de la caja y muchos relojes” dijo. La desesperación del locatario y su hijo, los hicieron salir rápidamente hacia la joyería y una vez que el hecho quedó al descubierto quisieron contactar a Carabineros, pero no habían llevado sus teléfonos celulares por lo que –dada la cercanía- tuvieron que ir hasta el municipio donde el guardia informó a la policía uniformada que en cosa de minutos llegó al lugar. Revisando las cámaras, se percataron que los delincuentes estuvieron desde las 10 de la noche hasta cerca de las 11 al interior de la joyería. “Estuvieron como 45 minutos adentro y ahí nos robaron unas hechuras de joyería, me robaron unas cosas que estaban separadas, que eran de los clientes que van abonando para diciembre y esos es una pérdida grande porque ahora también debo responderles a esos clientes”, explicó acongojado Luis Cárcamo. Los delincuentes ingresaron al recinto encapuchados y con guantes a fin de no dejar rastros, sin embargo, en las primeras diligencias realizadas por Carabineros en compañía con las víctimas, se encontró un par de guantes y el napoleón que presuntamente utilizaron para romper los candados, especies que fueron enviadas a peritaje en busca de huellas o antecedentes que permitan la individualización de los antisociales. También se están revisando cámaras del sector dado que existen sospechas que los antisociales para llegar a la parte posterior del local, pudieron haber ingresado desde un estacionamiento de calle Coimas, que colinda con la joyería. FOTOGRAFÍA REFERENCIAL
La tarde de este viernes, delincuentes armados y con sus rostros tapados, robaron en la tienda Entel en pleno centro de la ciudad. De acuerdo a las primeras informaciones, se trataría de cuatro sujetos, sumamente agresivos, que llegaron hasta la intersección de calles Prat con Portus, a bordo de dos vehículos. Tras amenazar a los trabajadores, habrían robado diversas especies, las que al momento no han sido cuantificadas. En su huida, los antisociales arrojaron “miguelitos” para evitar ser seguidos por la policía. Carabineros realiza intensas diligencias para dar con las identidades y paraderos de los –hasta ahora- desconocidos.
El general Max Jiménez, jefe de zona de la Región de O’Higgins, anunció la baja de cinco funcionarios de Carabineros implicados en el robo a la empresa de valores Brinks, ocurrido el 16 de agosto en Rancagua. En una conferencia de prensa conjunta con la Fiscalía, Jiménez calificó el incidente como de “extrema gravedad” y subrayó que Carabineros de Chile no tolerará comportamientos delictivos en sus filas. “Carabineros está comprometido con la seguridad de la comunidad y no aceptará personas que se alejen de su doctrina, menos aún delincuentes dentro de la institución”, afirmó. A pesar de la presión, Jiménez descartó renunciar a su cargo, defendiendo el trabajo realizado por las unidades de investigación del OS9 y del Departamento de Asuntos Internos (DAICAR). Finalmente, el general destacó la rapidez del operativo, que resultó en la detención de siete participantes en el robo, elevando a más de 20 los detenidos hasta la fecha. “Gracias a este despliegue operativo, hemos podido recopilar importantes antecedentes sobre la presunta participación de estos excarabineros”, aseguró Jiménez, reiterando su compromiso con la transparencia y la ética en la policía.
La Parroquia Nuestra Señora de La Asunción de Los Andes fue víctima de otro robo, pero esta vez afectando a uno de sus elementos más emblemáticos. Desde ambas campanas, ubicadas en el frontis del recinto, fueron sustraídos dos badajos de metal de aproximadamente 5 kilos cada uno, afectando completamente el funcionamiento de estas piezas, las que tienen un profundo valor histórico para la parroquia y la comunidad. Estas campanas, datan de mayo de 1896, representando un patrimonio significativo que ha sido parte importante de la vida religiosa de Los Andes por más de un siglo. Es así, como este incidente, se suma a una serie de robos que ha afectado a la parroquia en diversas ocasiones durante el trascurso del año, incluyendo hurtos en el comedor de la institución. La comunidad y trabajadores de la parroquia lamentan esta situación, puesto que solo se dedican a entregar ayuda a quienes más lo necesitan. Si bien, la parroquia cuenta con sistema de seguridad, señalan que este deberá ser complementado con cámaras prontamente, para así evitar este tipo de situaciones que finalmente podrían repercutir en el cierre definitivo del comedor solidario que allí se encuentra. Por su parte la iglesia espera que estos elementos puedan ser devueltos y hacen un llamado a la comunidad a estar atentos y reporten cualquier intento de comercialización de los badajos sustraídos.
La Parroquia Nuestra Señora de La Asunción de Los Andes enfrentó una lamentable situación tras el robo de la mercadería destinada a la entrega de almuerzos en su comedor San Alberto Hurtado, el cual beneficia a una gran cantidad de personas en situación de calle en la ciudad. Este incidente es el más reciente en una serie de robos que han afectado a la parroquia en otras ocasiones, tres durante las últimas semanas. Con esta última intrusión, ya son tres las veces que el comedor ha sido blanco de los delincuentes, impactando a cerca de 80 personas que dependen de este servicio para sus comidas diarias. Los involucrados pasaron el sistema de seguridad para ingresar y sustraer la mercadería, rompiendo el vidrio de una de las puertas para ingresar por la zona de la cocina y llevarse consigo diversos productos como carnes y verduras. Esta situación ha obligado a la parroquia a suspender temporalmente el servicio de almuerzos por 10 días, lo que ha generado descontento y preocupación entre la comunidad y los beneficiarios. La parroquia, que se ha esforzado por mantener este vital servicio comunitario a pesar de los reiterados robos, advirtió que futuros incidentes podrían llevarlos a reconsiderar la continuidad del comedor San Alberto Hurtado, lo que claramente afectaría al bienestar de las personas que dependen de este servicio esencial en la ciudad.